SDSU llegará con impulso, pero también con enorme presión, a su visita de este sábado ante Arizona, el equipo número uno del ranking nacional de basquetbol universitario. El duelo se jugará como visitante y con cobertura nacional, un escenario exigente para los Aztecs en una fase clave de la temporada.
San Diego State ganó cuatro de sus últimos cinco partidos y viene de una victoria contundente por 23 puntos ante Air Force, su primer rival de la Mountain West en la campaña. Ese resultado fortaleció la confianza del equipo, que mostró una ofensiva fluida y un mejor ritmo colectivo.
Ante Air Force, SDSU repartió 27 asistencias en 31 canastas, una cifra poco habitual que reflejó el crecimiento ofensivo del equipo. El entrenador Brian Dutcher destacó ese aspecto, aunque reconoció que la defensa deberá elevar su nivel para competir ante Arizona.
SDSU busca consistencia antes del reto mayor
El guardia BJ Davis lideró desde la banca con 19 puntos y se mantiene como el máximo anotador del equipo. Miles Byrd también aportó constancia, mientras que el centro Magoon Gwath continúa recuperando ritmo tras una cirugía de rodilla que lo mantuvo fuera varios meses.
Arizona llega invicto, con un promedio cercano a 90 puntos por partido y victorias ante equipos del Top 20. Además, domina la serie histórica ante SDSU y ha ganado los últimos cinco enfrentamientos directos.
Un cierre de temporada decisivo
Las métricas avanzadas colocan a San Diego State con menos del 10% de probabilidad de triunfo, un reflejo de la diferencia de profundidad y experiencia entre ambos programas en este momento.
Tras el juego ante Arizona, SDSU disputará pocos partidos más en diciembre antes de entrar de lleno al calendario de conferencia. Enero marcará el verdadero termómetro competitivo para un equipo que se prepara para su última temporada en la Mountain West antes del salto a la Pac-12.
Dutcher considera que el mayor reto reciente fue la falta de juegos. Ahora, con continuidad competitiva, SDSU busca convertir el ritmo de prácticas en resultados ante rivales de alto nivel.






