Fachada del Hotel del Coronado al atardecer, tras su renovación arquitectónica
El Hotel del Coronado reabre con más historia y lujo que nunca

El Hotel del Coronado reabre con más historia y lujo que nunca

A simple vista, el Hotel del Coronado parece ajeno al paso del tiempo. Su silueta inconfundible frente al Pacífico sigue siendo símbolo de elegancia y magnetismo histórico en California. Pero detrás de esa imagen inmaculada hay seis años de trabajo meticuloso, 550 millones de dólares invertidos y un equipo comprometido con preservar cada moldura, cada escalón, cada historia. Todo, para mantener vivo un ícono que cumple 140 años.

Ubicado en la bahía de San Diego, el “Del”, como lo conocen los locales, ha sido testigo de grandes momentos. Desde la visita de presidentes estadounidenses hasta su protagonismo en clásicos de Hollywood como Some Like It Hot (1959), este hotel no solo representa una hazaña arquitectónica, sino una pieza fundamental del patrimonio turístico y cultural del sur de California. La reciente restauración refuerza ese legado sin alterar su espíritu victoriano.

El Hotel del Coronado como motor económico y cultural

La intervención incluyó reforzamientos estructurales complejos, restauración artesanal de madera centenaria y un rediseño paisajístico que respeta la estética original. Más allá de una modernización estética, el proyecto se convirtió en una declaración: lo antiguo también puede ser el futuro del turismo premium.

También se renovaron 97 habitaciones históricas y se rediseñó la entrada principal. Ahora el acceso retoma la ubicación original de 1888, conectando a los visitantes con una experiencia que se siente tanto actual como eternamente clásica.

Preservar este tipo de monumentos cobra especial relevancia en una región como San Diego, donde la comunidad mexicana ha tenido un papel clave en la historia urbana y laboral. Muchos de los artesanos involucrados en la renovación provienen de familias hispanas con tradición en oficios manuales.

Lee también: Round Table Pizza cierra en La Mesa tras décadas de historia local