La recolección de basura dejó de ser un servicio silencioso para convertirse en el nuevo punto de fricción entre vecinos costeros de San Diego y el gobierno local en Estados Unidos. Lo que antes se asumía como parte del impuesto predial ahora llega detallado en el recibo y abre un debate sobre quién paga cuánto por vivir junto al Pacífico.
En junio el Cabildo de San Diego aprobó un cobro específico por el servicio que comenzó a aparecer en la factura del condado con el concepto SD Solid Waste Mgmt Fee. Para el año fiscal 2026 la cuota asciende a 523 dólares con veinte centavos, dividida en dos pagos iguales con vencimientos en diciembre y abril.
Recolección de basura y enojo en la costa
Vecinos de Pacific Beach, La Jolla y Mission Beach expresan que el nuevo esquema de recolección de basura se siente como una carga más en una ciudad donde casi todo sube menos los salarios. Algunos lo describen como un engaño porque recordaban una cifra mensual menor a la que hoy ven anualizada en el predial.
Además residentes de zonas como University City señalan que el cambio llegó sin una escucha real. Critican que sus correos y comentarios públicos sobre densidad urbana, estacionamientos y tarifas queden sin respuesta mientras se consolidan decisiones que impactan la vida diaria.
Por otro lado el debate también toca la justicia fiscal. Vecinos señalan que un nuevo propietario que compra una casa de precio medio en la costa paga en impuestos varias veces más que un dueño con décadas en la misma calle gracias a las reglas de valoración histórica. La percepción de que los recién llegados subsidian servicios para residentes antiguos se mezcla con el enojo por el nuevo cobro.
En consecuencia el malestar crece mientras la ciudad ya programó aumentos adicionales a partir de 2027 junto con mejoras como reciclaje semanal y recolección de objetos voluminosos, todo financiado por la misma tarifa de 523 dólares con veinte centavos y los incrementos previstos.
