Un ataque armado en Sydney dejó al menos 16 personas muertas y decenas de heridos durante un evento judío por Hanukkah en Bondi Beach, uno de los destinos turísticos más concurridos de Australia. Las autoridades confirmaron que el hecho constituye un atentado terrorista dirigido contra la comunidad judía.
El tiroteo ocurrió la tarde del domingo cuando dos hombres armados abrieron fuego contra cientos de asistentes reunidos para la celebración religiosa. Testigos relataron que los atacantes separaron a personas que no participaban en el evento antes de disparar de forma directa contra la multitud.
La policía abatió a uno de los agresores y detuvo al segundo tras un enfrentamiento que se prolongó por varios minutos. Al menos 40 personas resultaron heridas, nueve de ellas permanecen hospitalizadas y una se encuentra en estado crítico, según autoridades locales.
Investigación y respuesta oficial en Sydney
La policía de Nueva Gales del Sur localizó artefactos explosivos improvisados en un vehículo vinculado al atacante fallecido, lo que reforzó la clasificación del ataque como terrorismo. Equipos especializados aseguraron la zona mientras continuaba la investigación.
El primer ministro Anthony Albanese calificó el ataque como un acto de odio inaceptable y afirmó que agredir a ciudadanos judíos equivale a atacar a toda Australia. En tanto, autoridades federales reforzaron la seguridad en sinagogas y espacios comunitarios en varias ciudades.
Durante el ataque, un civil logró desarmar a uno de los agresores, acción que las autoridades reconocieron como decisiva para evitar más muertes.
El atentado ocurre en un contexto de incremento sostenido de actos antisemitas en Australia, documentado por organizaciones comunitarias y autoridades, lo que ha encendido alertas sobre la radicalización y la violencia dirigida por motivos religiosos.






